Una entidad que se propone hacer una ruptura con las formas de pensar, sentir y hacer en la vida social y en particular La Política se tiene que proponer una ruptura con las formas organizacionales dadas y con la semántica en que se sustentan.
Las organizaciones que se dedican a la gestión del conocimiento, al desarrollo de prácticas en el campo de las políticas públicas, desarrollan en muchos casos prácticas innovadoras, instituyentes que luego marcan el desarrollo de planes, programas y proyectos, que a la postre se institucionalizan.
Las organizaciones fuertemente institucionalizadas tienden a desarrollar prácticas rutinarias y naturalmente a reproducir y reproducirse. Esto no implica que inevitablemente no tengan capacidad de innovar y trascender lo dado, pero lo cierto es que la capacidad de instituir nuevas formas en el pensar, el sentir y el hacer son más factibles en las organizaciones nuevas, nacientes, emergentes.
El hecho de estar naciendo es una excelente oportunidad para Siembra y para quienes la constituyen para favorecer e innovar en el desarrollo de formas organizativas y de gestión del saber llevando adelante nuevas formas de gestión del poder, del conocimiento y de la praxis social.
Esto implica al mismo tiempo re-semantizar roles, funciones y tareas tanto en el campo de lo organizacional como en las formas de relacionamiento hacia dentro y hacia fuera de la propia organización.
No obstante esto, no es posible construir sobre la nada, más aún, no es pertinente construir desde la nada, pero si es necesario re-significar las formas y los contenidos, por eso proponemos conceptos que proponen hacer de la organización una entidad de corte colaborativo y horizontal, buscando contraponerlas a formas caracterizadas por la verticalidad y las jerarquías.
Las Salas, Usinas y Talleres son al mismo tiempo la razón de ser y las herramientas que dispone Siembra para implementar sus iniciativas. La razón de ser de Siembra tiene que ver con todas aquellas acciones que contribuyan a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos contribuyendo a la emancipación personal y social de los mismos.
Las Salas se definen como un ámbito de conversaciones, que facilitan el intercambio de ideas, la emergencia de iniciativas, que a posteriori se plasman en la concreción de Usinas que darán lugar al diseño e instalación de Talleres de diverso tipo.
De esta manera, podemos caracterizar a las Salas como aquel dispositivo organizacional de carácter más general, a las Usinas como dispositivos más específicos en lo temático, y los Talleres, del carácter que sean, se trate de aquellos que tienen como objeto la Investigación, lo educativo pedagógico y/o formativo, la promoción social, cultural o económica de los ciudadanos, como los dispositivos del hacer, de lo táctico de Siembra. Son quienes tienen como fin operacionalizar las ideas generales emergentes de las Salas, que las Usinas toman, procesan y elaboran, para que finalmente se plasmen en Proyectos los, que son ejecutados de acuerdo a las características de cada uno de ellos mismos.